PASOS PARA SER UN CICLISTA PROFESIONAL
Si uno de tus más grandes anhelos es ser un ciclista profesional, competir en el Tour de Francia o en el Giro de Italia, es importante que seas consciente de que no lo lograrás de la noche a la mañana o por un golpe de suerte. Además de ser una manera de ganarse la vida, ser ciclista profesional incluye tener la preparación y la disciplina adecuada para poder realizar largos y exigentes recorridos en los que deberás sacrificarte enormemente.
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Si alguna vez te preguntaste cómo lo han logrado o deseas serlo, ten en cuenta estos pasos y prepárate para lograr tus sueños; sin embargo, leerlos no garantizará tu éxito, todo depende de ti.
Entrenamiento.
Lo primero es comenzar a practicar desde joven, haciendo rutas cada vez en menos tiempo, cronometrando el tiempo y entrenando fuerte para superar tus propias marcas. En esta etapa, comienzas a adquirir la técnica que necesitas para convertirte en todo un profesional, así que comienza a entrenar de 4 a 6 horas diarias, combinadas con levantamiento de pesas para fortalecer los músculos de las piernas y el tronco, al menos una hora un par de veces por semana; ejercicios como cuclillas, extensión y flexión de piernas y zancadas, también te ayudarán a entrenar de forma completa.
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De amateur a profesional.
No puedes ser un ciclista profesional de repente; durante el proceso, arrancarás siendo un amateur a nivel local o regional, y poco a poco ir puliéndote, practicando y compitiendo con gente que podría estar a tu mismo nivel. La idea es que de forma gradual, te exijas en pruebas de un nivel mayor, como pruebas nacionales. Luego, únete a un club de ciclismo y participa en los entrenamientos semanales; aquí conocerás personas mejores que tú que de seguro te enseñarán y te retarán.
Equipo de trabajo.
Si has logrado ganar alguna prueba a nivel local o nacional, quizá captes la atención de un auspiciador, entrenador o un equipo profesional. Aunque quienes auspician no donan tanto dinero a las ligas amateurs, contar con ellos hace una diferencia al cubrir costos de equipamiento, entrenamiento y viajes. Además, es síntoma de que ya una parte del país o de tu región comienza a conocer de ti.
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Disciplina y constancia.
Luego de tener la suerte de haber ganado algo de dinero en una competencia y tienes equipo, sigue entrenando con disciplina y perseverancia. Los ciclistas no ganan tanto dinero como los futbolistas, pero quienes consiguen hacer parte de un equipo a nivel nacional, logra ganar varios millones cuando llega a la cima, incluso en euros. Acepta ofertas para competir en equipos profesionales de talla internacional y sigue siempre detrás de tus sueños.